Esa gran familia llamada Heavy Metal

Un libro de lo más curioso, ahora mismo no recuerdo que es lo que me hizo comprarlo … pero da igual. Escrito por Ivan Allué. Nunca me he considerado un «Heavy», aunque siempre lo he escuchado, al igual que oigo hiphop y no me considero un b-boy … en fin, que me gusta oír un poco de todo (o para ser exactos, un poco de casi todo).

Al leer el libro me he sentido identificado varias veces … recuerdo cuando era más pequeño (yo soy del 73) y en mi barrio estaban «los heavys», dándole a la litrona, un escándalo … hasta que crecimos un poco y después éramos nosotros los que estábamos dándole al litro, y dentro de nuestro «grupo» había de todo.

Por suerte o por desgracia, uno de mis vicios es comprar discos (ahora menos, todo hay que decirlo), con mis recursos limitados, recuerdo pasarme horas en el «Discoplay de la Vaguada», o más adelante en «Madrid Rock» o en «La metralleta», intentando ajustar la poca pasta que tenía para comprar todo lo que pudiese.

Es una mierda, porque … cuando tenía tiempo para poner discos (y con tiempo me refiero a poder sentarme tranquilamente, poner un disco y escucharlo mientras lees las letras o le echas un ojo a la portada, oír música mientras trabajas esta bien, pero no es lo mismo) no tenía dinero para comprarlos, y ahora que podría permitirme el lujo de comprar más, no hay donde hacerlo, y no tengo tiempo para disfrutarlos. Para que os hagáis una idea, los dos últimos CD’s que compre (que ya los había escuchado mil veces, pero lo hice por echar una mano) siguen aquí al lado, sin abrir … y es que ahora mismo ni tengo una lectora de CD’s donde ponerlos.

El caso es que el libro es interesante, sobre todo por las reflexiones … estoy de acuerdo con algunas cosas, y no demasiado con otras (como suele ser siempre) … pero merece la pena leerlo. Un buen montón de grupos que no conocía (y otros a los que si) y que espero poder ir escuchando.

Desde hace algún tiempo estoy intentando cambiar mi forma de hablar … de decir «este disco es una mierda» a «este disco no me gusta». He tenido varios casos de eso … discos que me compro y que no soy capaz de escuchar (y no, no es el negro de metallica, que no me gusta) y que lo mismo les doy una segunda oportunidad 10 años después y ostia … molan más, o no siguen sin molar y vuelven a la estantería.

No se si os acordaréis de boletin discoplay, que luego se llamo BID y luego acabó siendo el catálogo tipo. Esta era otra de mis aficiones (o vicios), escudriñar el catálogo a ver que podía comprarme, cuando tenían esas ofertas de … 10 maxis variados por 5€. Eran ofertas imposibles de resistir. Algunos descubrimientos llegan de ahi … o algunas cosas raras, como aquel maxi de John Mcenroe.

Algún día tengo que volver a escucharlo.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.